Los comandantes en jefe
En mi punto de vista, esta gente comandando las Instituciones castrenses, no sólo tienen el deber de defender la Patria del enemigo Externo.
La Constitución vigente le obliga a defender la Patria del enemigo interno sin ser deliberantes, es decir tomar una posición de una doctrina o dogma de algún partido político.
Max Weber con mucha claridad dijo :
"En el pasado de las más diversas asociaciones, comenzando por la asociación familiar, han utilizado la violencia como un medio enteramente normal.
Hoy, por el contrario, tendremos que decir que Estado es aquella comunidad humana que, dentro de un determinado territorio, reclama (con éxito) para sí el monopolio de la violencia física legítima.
Lo específico de nuestro tiempo es que a todas las demás asociaciones e individuos sólo se les concede el derecho a la violencia física en la medida en que el Estado lo permite. El Estado es la única fuente del "derecho" a la violencia" [Hauriou, André].
Y que ocurre en Chile:
Tenemos que quienes están gobernando, Boric y todos los políticos, han fallado en hacer cumplir la ley.
Tenemos una delincuencia habitual desatada, un narco trafico dueño de las calles y ciudades del país.
Chile ha sido invadido por ciudadanos de otros países y de una gran mayoría no conocemos sus intenciones.
Y lo peor el país esta dividido en dos, por causa del terrorismo izquierdista.
Las Fuerzas Armadas y de Orden no están cumpliendo con el mandato Constitucional que los obliga a usar toda la Fuerza y Violencia necesaria para derrotar los enemigos internos que he nombrado.
Sin necesidad de desconocer a los gobiernos fallidos que ha tenido Chile hasta este último de BORIC, las Fuerzas Armadas y de Orden, deben ser precisamente las que obliguen incluso a los gobernantes a tomar las medidas necesaria y coordinar una guerra interna en el territorio y diezmar al enemigo interno que ha derrotado a los gobiernos por su ineptitud e hipócrita colaboracionismo.
Con la evidente cobardía de los comandantes en jefe y la incorrecta deliberación en que han caído [han decidido ponerse al servicio de la ONU Chile], bien poco se puede esperar para ganar esta guerra interna.
La Constitución vigente le obliga a defender la Patria del enemigo interno sin ser deliberantes, es decir tomar una posición de una doctrina o dogma de algún partido político.
Max Weber con mucha claridad dijo :
"En el pasado de las más diversas asociaciones, comenzando por la asociación familiar, han utilizado la violencia como un medio enteramente normal.
Hoy, por el contrario, tendremos que decir que Estado es aquella comunidad humana que, dentro de un determinado territorio, reclama (con éxito) para sí el monopolio de la violencia física legítima.
Lo específico de nuestro tiempo es que a todas las demás asociaciones e individuos sólo se les concede el derecho a la violencia física en la medida en que el Estado lo permite. El Estado es la única fuente del "derecho" a la violencia" [Hauriou, André].
Y que ocurre en Chile:
Tenemos que quienes están gobernando, Boric y todos los políticos, han fallado en hacer cumplir la ley.
Tenemos una delincuencia habitual desatada, un narco trafico dueño de las calles y ciudades del país.
Chile ha sido invadido por ciudadanos de otros países y de una gran mayoría no conocemos sus intenciones.
Y lo peor el país esta dividido en dos, por causa del terrorismo izquierdista.
Las Fuerzas Armadas y de Orden no están cumpliendo con el mandato Constitucional que los obliga a usar toda la Fuerza y Violencia necesaria para derrotar los enemigos internos que he nombrado.
Sin necesidad de desconocer a los gobiernos fallidos que ha tenido Chile hasta este último de BORIC, las Fuerzas Armadas y de Orden, deben ser precisamente las que obliguen incluso a los gobernantes a tomar las medidas necesaria y coordinar una guerra interna en el territorio y diezmar al enemigo interno que ha derrotado a los gobiernos por su ineptitud e hipócrita colaboracionismo.
Con la evidente cobardía de los comandantes en jefe y la incorrecta deliberación en que han caído [han decidido ponerse al servicio de la ONU Chile], bien poco se puede esperar para ganar esta guerra interna.
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